POLENTA CREMOSA CON TOMATES ASADOS

Ya sabéis que soy novata con la polenta y que he empezado a tomar contacto con ella hace muy poquito tiempo. La primera receta con la que me lancé a probarla fue con una pizza que quedó realmente deliciosa y en esta ocasión voy a compartir receta en su versión puré: polenta cremosa con tomates asados. La textura resultante es super suave y agradable y además muy saciante, perfecta para servir en pequeñas cantidades con muchos toppings.

La polenta no es otra cosa que harina de maíz mezclada con agua (y con bebida de avena en mi caso) a partir de la cual se obtiene un preparado muy versátil en gastronomía, siendo típica del Norte de Italia. Aunque he descubierto que la polenta no se hace exclusivamente con harina de maíz, se pueden utilizar otras harinas diferentes tanto de cereales como de frutos secos, así que tendré que seguir investigando para probar nuevas combinaciones. De momento os dejo con esta versión clásica, que además el libre de gluten y por lo tanto apta para celíacos. Una alternativa deliciosa y super reconfortante para estos días tan fríos. Hoy vuelvo a usar mi cuencos Bitz de Shoptnordico para comer bien bonito… ¡Allá vamos!

POLENTA CREMOSA

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Raciones: 4 raciones

INGREDIENTES

PARA LA POLENTA CREMOSA

• 1 cup de polenta (125 gr)
• 3 cup de agua
• 1 cup de bebida de avena
• 1 cucharadita de ajo en polvo
• 1 cucharadita de cebolla en polvo
• nuez moscada recién rallada
• 1 pizca de pimienta blanca en polvo
• 1 chorro de aceite de oliva virgen extra
• Sal rosa u otra al gusto
• 50 gr de queso curado para rallar

PARA LOS TOPPINGS

• 2 tomates grandes tipo pera
• 1 cebolla
• Albahaca y orégano seco
• Aceite de oliva virgen extra
• Sal al gusto
• Queso curado
• Avellanas tostadas

INSTRUCCIONES

1.  Para hacer la polenta cremosa ponemos el agua y la bebida de avena en una cazuela, cuando esté caliente añadimos la polenta, las especias y un poco de sal al gusto y cocinamos sin dejar de remover con una cuchara de madera hasta obtener una crema homogénea y espesa que se parecerá bastante al puré de patata. Como último paso agregamos un chorro de aceite de oliva vírgen extra y queso curado recién rallado.

2. Para los toppings cortamos los tomates y la cebolla en gajos, rociamos con un chorrito de aove y sal y horneamos a 170º unos 20-25 minutos, hasta que estén hechos y ligeramente dorados.

3. Servimos la polenta caliente en cuencos, decoramos con la cebolla y los tomates asados. Añadimos un chorrito extra de aove, albahaca y orégano secos, más queso padano rallado o servido en onza y un puñadito de avellanas tostadas picadas.