Empezar la mañana con energía es una gozada y una de las mejores maneras (y más deliciosas) que se me ocurren es con un buen zumo de frutas y verduras variadas. Yo suelo prepararlos habitualmente y además lo ideal es conocer los beneficios de cada ingrediente para elaborarlos no solo al gusto de nuestro paladar, sino también sabiendo lo que nos puede venir mejor para el organismo en ese momento. Hoy me he preparado un zumo de cítricos (naranja y pomelo) con zanahoria, jengibre fresco y té blanco. El sabor es fuerte pero muy rico, el color maravilloso y además esta mezcla será una potente fuente de antioxidantes, vitaminas y minerales y un buen remedio anti inflamatorio y contra el estrés gracias a las propiedades curativas del jengibre, además de ser una bebida muy baja en calorías 🙂
INGREDIENTES PARA 2 PERSONAS
- 1 naranja
- 1 pomelo
- 1 naranja sanguina
- 2 zanahorias
- 1 rodaja de jengibre fresco
- 1 taza de té blanco para rebajar (también puedes usar agua o cualquier otro té que tengas a mano)
Pela las zanahorias y la rodaja de jengibre y colócalos en el vaso de la batidora junto al té. Si vas a utilizar té blanco (o cualquier otra variedad) te recomiendo que lo hagas con tiempo y lo guardes en el congelador 20-30 minutos antes para que esté bien frío (o mezclarlo con hielo) aunque esto es absolutamente opcional. Exprime las naranjas y el pomelo también en el vaso. Ponle la tapa y comienza a batir hasta que la zanahoria y el jengibre estén completamente triturados. Si el zumo sigue estando muy espeso para tu gusto rebaja con un poco de agua fría. El endulzante es opcional, si el sabor resultante te parece demasiado ácido puedes añadirle una cucharada de sirope de agave, miel o panela. Sírvelo rápido y consúmelo inmediatamente para beneficiarte de todas las vitaminas y nutrientes.
Este zumo está hecho en batidora para aprovechar toda la pulpa de los ingredientes, pero si te gustan más los zumos líquidos te recomiendo que lo hagas con licuadora.
